lunes, 20 de enero de 2014

Jueves 16: Las previsiones nos citaban con el centro de la calma  y esta vez si coincidían, una brisa de 5-8 nudos te hacía desplazar sobre 2, ya iba bien, simplemente es dejar pasar el tiempo, y que las millas sumen. Para el día siguiente la meteo era muy diferente. Sobre la noche el viento giró al ESTE y se reforzó quedando en 20.25nudos lo que hizo una noche inquieta y de vigía.

Viernes 17: Amanece gris, con alguna llovizna, y la vida en el interior es incómoda o inviable, a media mañana adelantándose a las previsiones que cada día envian Juli, y Mao o yo mismo miro. El viento del este sube a 30nudos con una mar del Ne. Llega a los 40nudos y sigue un génova totalmente recogido, el otro con el tangon sólo un trozo pequeño, vamos sobre 8-9 nudos el piloto de viento realiza a la perfección su trabajo pero en 42 nudos una ola lo desvia tanto de su rumbo que no consigue volver, paso a llevarlo yo y el viento sube a 45,al llevar tiempo observando el comportamiento del barco con las olas compruebo que hay muy poco margen de maniobra. El Antull ha de ir entre al rumbo entre 270 y el 300 así va sobre las olas fuera de ahí tiene tendencia y muy rápida a quedarse atravesado al mar enorme que se ha formado. La mayor que estaba recojida pero no cerrada, su cremallera sale la mitad a volar por su cuenta, se queda dando banzos el último rizo, ahora no es importante. Enciendo motor, en el anemometro veo 48 pero si la prevision era 25!!!. Concentracion absoluta en la navegación, en dos ocasiones el barco queda atravesado pero con un golpe de motor enfila nuevamente su rumbo bueno, todo alrededor es blanco. En una intuición miro hacia atrás y mi sorpresa es que no hay nada!!, en la popa del barco hay un abismo que genera vertigo, con el arnés agarrado en dos sitios diferentes las piernas en máximo angulo y las manos en la rueda fuertemente, con la marca del centro de la rueda entre los dedos. Veo subir de la nada una mole de agua, cuando crees que saldrás catalpultado hacia el cielo, subes con ella , y tan suave como subio te deja para irse en un precipicio descendiente, solo miras el compas, 27o-300 eso es lo único importante.
Pasaron dos horas hasta que el viento  bajó y después la mar, aunque sigue cruzada con alguna ola de través. Con 35 nudos el piloto de viento se volvió hacer con la embarcación, aquello ya parecía casi mar plana.
El marmitako de la nevera sería para otro día, tocó menú de temporal,(potitos de pollo con ternera y verduras de la huerta y potito seis frutas) eso sí ,para mayores de 6 meses.
La resaca duró toda la noche.

Sábado 18: se mantiene una mar de varios metros pero un viento de sólo 25. Hoy sí comemeremos el marmitako!!
 17º 08,N y 43º 22.W a sólo 1000 millas del destino esperando haber si llegan lo tranquilos alísios.

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